TIPS CULINARIOS PARA ADELGAZAR

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Si son tus deseos lucir en forma con la llegada del verano, debes saber que sin sacrificio ni sufrimiento puedes lograr buenos resultados, para ello, os dejamos un listado de pequeños cambios para incorporar en la cocina con el objetivo de adelgazar de aquí al verano.

 

Pequeños pasos, grandes resultados

Con frecuencia la desesperación nos gana en esta época del año y acudimos a estrategias impactantes o cambios drásticos en nuestra dieta que culminan agotándonos antes de lograr resultados, por eso, la mejor opción es dar pequeños pasos y con paciencia, para alcanzar los avances que deseamos.
Por ello, te proponemos comenzar ahora incorporando pequeños cambios en tu cocina que repercutirán en las calorías de tu dieta así como en la calidad de la misma y te ayudarán a desprenderte de los kilos de más poco a poco, pero de forma sostenida en el tiempo.
Ten en cuenta que siempre es mejor un cambio duradero, que no deja de producir resultados, que un cambio brusco pero temporal que prontamente deja de ser útil para alcanzar el objetivo planteado.

 

Pequeños trucos culinarios para adelgazar de aquí al verano

Partiendo de la base de que todos amamos la cocina y por lo tanto, elaboramos nuestros propios platos en casa, te proponemos incorporar los siguientes pequeños trucos para conseguir adelgazar poco a poco, de aquí al verano:


-Elige más ingredientes frescos que son los que conservan mayor contenido acuoso, más fibra y textura y en muchas ocasiones, presentan más nutrientes buenos. Por ejemplo, escoge frutas y vegetales frescos en lugar de enlatados, pescados y carnes frescas en reemplazo de conservas, congelados o curadas.

-Retira la grasa visible y escoge ingredientes bajos en grasas. No sólo es importante que retires la veta de grasa de la carne, sino que escojas carnes magras, lácteos desnatados, quesos bajos en grasas e ingredientes en su versión menos grasa. De esta forma, podrás seguir usando similar cantidad pero estarás reduciendo notablemente las calorías de las recetas.

-Usa más legumbres para elaborar tus platos, que son ingredientes que concentran pocas calorías y sacian mucho. Además, aportan mucha fibra y más proteínas que las pastas con buenos minerales y vitaminas para el organismo.

-Cocina la cantidad justa, teniendo en cuenta para ello el tamaño de las raciones. Esto te ayudará a no comer de más y a poder moderar el volumen de cada ingesta con mayor facilidad.

-Cuantifica el aceite, es decir, mide las cucharadas de materia grasa que usas para saltear, aderezar o elaborar tus platos, pues con frecuencia tiramos un chorro sin saber que podemos estar usando en exceso y sumando muchas calorías sin darnos cuenta. Lo ideal es no usar más de una cucharada de materia grasa por ración o por comensal.

-Usa reemplazos menos calóricos que te permiten restar energía a las recetas sin darte cuenta. Por ejemplo, reemplaza nata o mantequilla por quesos cremas o yogur natural, mayonesa por puré de aguacate, entre otros.

-Usa más hierbas y especias que te ayudarán a emplear menos sodio y aderezos comerciales y además, al resaltar el sabor de los platos promoverán la saciedad tras su ingesta.

-Pásate a los cereales integrales y sólo úsalos en un plato al día. Es decir, cambia la harina por harina integral, el pan blanco por pan integral y demás refinados por granos enteros. Además, intenta elaborar platos con cereales sólo una vez al día, preferentemente, durante el almuerzo o comida del mediodía.

-Incorpora verduras a todas tus recetas, con el objetivo de sumar agua, fibra y volumen sin agregar demasiadas calorías. Además, estarás sumando colores al plato y buenos nutrientes para la dieta. Por ejemplo, a tu clásica salsa de tomate para pastas súmale brócoli o judías verdes, a tus lentejas guisadas añádele zanahoria, pimiento y berenjena, y a tus hamburguesas agrégale cebolla picada, zanahoria rallada o berenjena rallada. 
 
-Evita cocciones que requieran mucha materia grasa y prefiere las cocciones al vapor, a la plancha, al horno o bien, las recetas que llevan ingredientes frescos, sin someter a cocción, pues con ellas conservarás el volumen, no agregarás calorías ni perderás nutrientes buenos para la salud.


Ya sabes, puedes comenzar ahora a incorporar estos pequeños cambios en tu cocina para adelgazar de aquí al verano casi sin darte cuenta y disfrutando de platos sabrosos, con buenos nutrientes y que sacian.
Por supuesto, si puedes acompañar estos cambios en la cocina con una adecuada ingesta de agua, un buen descanso cada noche y la práctica regular de actividad física, sin duda los resultados que lograrás de aquí al verano serán superiores.
Aprovecha tu amor por la cocina e incorpora estos pequeños cambios que beneficiarán tu salud y modificarán tu forma física poco a poco, de aquí al verano.